"Más allá de los tabúes: cómo reconectar con tu placer consciente"
Crecer rodeados de silencios, miradas incómodas y frases como “eso no se habla” nos ha dejado heridas invisibles. El placer, la sensualidad y el cuerpo se han convertido en territorios prohibidos… hasta que decides habitarlos de nuevo.
Grei
8/9/20252 min read


Más allá de los tabúes: cómo reconectar con tu placer consciente
Introducción: el silencio que nos enseñaron
Crecer en una cultura donde las palabras “placer” o “sexualidad” se susurran o se evitan deja cicatrices invisibles. Desde pequeños, escuchamos frases como: “Eso no se toca”, “De eso no se habla”, “Es algo malo”. Y así, lo que debería ser natural y saludable se convierte en un territorio prohibido.
El problema es que, con el tiempo, ese silencio se transforma en desconexión: de nuestro cuerpo, de nuestras emociones y, sobre todo, de nuestro propio poder.
Pero hay un camino de regreso. Y no empieza afuera, sino adentro.
El peso de los tabúes
Los tabúes no nacen de la nada. Son creencias heredadas de la religión, la educación y la sociedad, repetidas durante generaciones. Aunque muchas de ellas tuvieron la intención de “protegernos”, en la práctica han creado vergüenza, culpa y miedo hacia algo tan humano como sentir.
Cuando cargamos con esos bloqueos:
Nos cuesta pedir lo que necesitamos en pareja.
Vivimos experiencias íntimas sin realmente disfrutarlas.
Asociamos el placer con algo “sucio” o “incorrecto”.
Romper un tabú no es rebelarse contra la moral, sino recuperar la libertad de explorar quién eres sin filtros impuestos.
Qué es el placer consciente
A diferencia del placer automático —ese que busca una gratificación rápida sin conexión emocional—, el placer consciente es una experiencia completa. No se trata solo del cuerpo, sino de la mente y la energía.
El placer consciente significa:
Estar presente en cada sensación, sin prisas ni distracciones.
Escuchar a tu cuerpo y entender sus señales.
Disfrutar desde la calma, no desde la urgencia.
Es un acto de autocuidado y de amor propio.
3 pasos para reconectar con tu placer consciente
1. Respira con intención
La respiración consciente es una de las herramientas más poderosas para calmar la mente, conectar con el cuerpo y aumentar la sensibilidad. Dedica unos minutos cada día a inhalar profundamente, sentir cómo el aire recorre tu cuerpo y exhalar liberando tensiones.
2. Conócete sin juicios
Explora tu cuerpo con curiosidad, sin etiquetas de “bien” o “mal”. Observa qué te gusta, cómo reacciona tu piel, tus músculos, tu respiración.
3. Cambia la narrativa interna
Cada vez que aparezca un pensamiento de culpa o vergüenza, recuérdate: “Sentir es natural. Sentir es mío. Sentir es vida.”
El viaje de Grei: de los go-go bares a la libertad interior
En 33 Orgasmos: La vida de una Stripper, Grei relata su paso por los go-go bares de New Jersey no como un relato erótico superficial, sino como un camino de autodescubrimiento. Cada capítulo es una historia que transforma: del dolor a la sanación, de la vergüenza a la libertad.
Este libro no habla solo de sexo. Habla de cómo el cuerpo puede ser un templo, de cómo el placer puede ser una herramienta de creación y de cómo romper el silencio puede cambiar una vida.
Un paso hacia ti misma
Si has sentido que vives desconectada, que hay algo más profundo esperándote, este es el momento de escucharte. El placer consciente es un derecho, no un lujo.
💡 Llévalo hoy y sé parte del movimiento que está rompiendo el silencio sobre la libertad y el placer consciente.